martes, 27 de enero de 2009

EL CAMINO


A los 12 pasos, aparté de mi camino sangre en polvo de dos perros sin nombre, más adelante subí en mi espalda a dos ancianos dromedarios, al dar el paso 30 me topé con 4 pelotas desalmadas a un costado del barro olvidado. Cuando al cielo se le iban los colores, me guié por el olor de las semillas que el príncipe de la noche suele soltar por esos bosques. Al dar el 54...me perdí....A veces creo que la justicia es un número impar.

1 comentario:

Yared Medina dijo...

"A los 12 pasos, aparté de mi camino sangre en polvo de dos perros sin nombre"


A mí a veces me dicen perro y mi pata es deivis sin nombre. ^^